Por: Alejandro Martin – Socio Director de TDSystem

«En cada organización hay poetas que aportan las ideas e ingenieros que se encargan de llevarlas a la realidad» Francis Ford Coppola. Cineasta norteamericano. Detroit 1939.

Coppola sostiene que una de las maneras más eficaces para sacar lo mejor de la gente es llevarla hacia un espacio creativo, como en la infancia, cuando se inventaban juegos y situaciones. En ese contexto, las reuniones de trabajos son como una película en la que hay actores-participantes que deben transitar por los conceptos; otros que sean más agresivos con las decisiones, asumiendo riesgos, y un grupo que defienda los proyectos. El líder de la reunión deberá ser quien defina y distribuya rápidamente los temas y las tareas.

Y, como en el cine hay distintos géneros, en las reuniones sucede lo mismo y podemos asistir o dirigir reuniones que corresponden a diferentes géneros. A saber:

• Las de spaghetti western con esa estética sucia y roles de clichés planos.
• Las de aventura con improvisaciones y sorpresas a cada momento.
• Las de terror en las que el jefe empieza acusando y termina amenazando
• Las de acción pasando de un tema a otro sin un guión medianamente trazado.
• Las de suspense sin que sepan porqué asistir ni cómo les va a ir en la reunión.
• Las de ciencia ficción, “rollo avatar”, en las que los power point vuelan, pero nada aterriza.
• Las documentales con tal cantidad de documentos que ya por sí desmotivan a los asistentes.
• Las comedias en las que no sabes si el tema va en serio o bien se han juntado todos los despropósitos en una misma reunión.

Géneros como el drama, el erótico y el policiaco los dejamos para otro momento dada su importancia y profundidad.

Sí, sí que soy consciente de que las reuniones de trabajo son necesarias ya que sirven para la integración (son espacios en los cuales se trabaja la pertenencia), la información e intercambio de experiencias. Pero debemos evitar que se convierta en algo tedioso, plano o intrigante.

Vivimos en un mundo en el que todos tratamos de tener una dosis de protagonismo, de destacar y de cumplir roles activos. Una reunión de trabajo es una buena oportunidad para ello. Si has de organizar una reunión, sería conveniente que eligieras un género en el que cada uno de los asistentes tenga su espacio de protagonismo.

“Las personas queremos salir en la foto”. Si participamos en una reunión queremos ser  actores protagonistas, en donde ser protagonista implica, por lo menos, tener la oportunidad de poder cambiar una coma o un paréntesis. De lo contrario, infórmales del género de la reunión; así podrán pertrecharse al fresco del aire acondicionado con sus palomitas y Coca-Colas.