Por: Alejandro Martín – Socio-Director de TDSystem

Si quieres cambios pequeños, trabaja en tu conducta; si quieres cambios significativos, trabaja sobre tus paradigmas. – Stephen R. Covey

– Mira, Moe, vamos a hablar de hombre a hombre antes de que te vayas de vacaciones -Dice Homer- Porque eres una persona con la que se puede hablar  ¿No?

– ¡Por supuesto Homer! Gracias por creer eso de mí, responde Moe.

– Así es para la gente a la que no nos gusta andarnos por las ramas. Apunta Homer

– ¿Y para la gente normal, qué?, pregunta Moe señalando a Lenny y Barney.

– La gente normal no sabe lo que quiere, pero tú y yo sí, afirma Homer.

– ¡Y tanto Homer!. Gracias. ¿Y qué es lo que me quieres decir? , pregunta Moe.

Este diálogo se produce mientras Moe, sirve cervezas a sus escasos clientes
a la vez de que se queja de que las cosas no pueden seguir así, porque los clientes no entran y los que entran consumen menos. Homer, amigo y cliente habitual se siente apenado por tal situación, y por eso se atreve a sugerir:

– Moe, tienes que cambiar el decorado, introducir nuevas bebidas y traer alguna animadora.

Ante esta propuesta de Homer a Moe, lo primero que se le ocurre es:

-“Eso es imposible”.

-¿Por qué no? Le pregunta Homer que ya se ha metido de lleno a improvisado consejero.

Moe, con gesto un poco molesto responde:

-“Ya lo intenté hace tiempo y no dio resultado”. Además añade, “yo no hago las cosas de ese modo”

-Pero ahora son otros tiempos. Puedes intentarlo de nuevo, puntualiza Homer.

La cara de Moe sigue contrariándose y comenta:

-Hacerlo de ese modo va contra mi política y la esencia de mi taberna. Además, ¡Si tú llevaras aquí todo el tiempo que yo llevo, comprenderías que lo que sugieres es completamente absurdo!”.

Los vapores de la cerveza planean sobre la conversación que se va perdiendo entre los ruidos de la taberna.

Homer se pregunta:

-¿Por qué a Moe le cuesta tanto aceptar los cambios para mejorar su taberna.

-¿Tal vez Moe no es sea my inteligente y ese puede ser el motivo?.

Sin descartarlo, Homer reconoce que hay  personas inteligentes en Springfield que están atrapadas en el mismo paradigma que Moe. Incluso a él le cuesta cambiar de marca de cerveza.

Los vapores de la cerveza van enturbiando la vista de Homer, aunque todavía alcanza a preguntarse si tal vez Moe no estará viendo el futuro de su taberna con las mismas “gafas” que utilizaba en el pasado cuando bastante humo y un poco de alcohol barato valían para encandilar a los clientes.

Antes de terminar de apurar su cerveza, Homer alcanza a decirle a Moe que si desea conseguir algo diferente con su taberna probablemente deba  cambiar el modo de ver las circunstancias que la rodean, lo que hace actualmente en ella y, con toda seguridad, cómo lo hace. Tal vez unas buenas vacaciones le ayuden a hacer las tres cosas y pueda encarar con éxito el futuro de su taberna.

¡Buenas vacaciones para Moe y para todos los que tenemos que cambiar algo en nuestra vida!